FAQ Luznor
Luminaria de emergencia minimalista, eficiencia energética y diseño vanguardista
Los cargadores son monofásicos con transformador apantallado de aislamiento de red y puente semicontrolado de diodos y tiristores. Esta tecnología procura elevada fiabilidad y larga duración de vida.
Sí. Son ejemplos típicos tensiones de alimentación de red diferentes a 230 Vc.a., tensiones de salida o número de elementos de batería diferentes, aparatos de medida opcionales, etc.
Cualquier necesidad especial puede ser planteada a Luznor cuyo departamento técnico la atenderá con la mayor atención para procurar la solución más adecuada.
No. La tensión de salida es la tensión de la batería, cuya tensión depende de su estado de carga, temperatura, etc. En caso de descarga la tensión final será del orden de 1,10 V/e en Ni-Cd y 1,75 V/e en plomo estanco. En carga la tensión será del orden de 1,50 V/e en Ni-Cd y 2,27 V/e en plomo estanco.
Sí. El cargador proporcionará toda su intensidad nominal y el resto será aportado por la batería, que, lógicamente, entrará en descarga. La batería recuperará la capacidad perdida al cesar dicha punta de corriente.
De manera estándar todas las alarmas locales provocan la alarma remota tras la temporización. Sin embargo, es fácil seleccionar que algunas no lo hagan. Esto debe ser solicitado a Luznor para que lo configure adecuadamente o indique el procedimiento para llevarlo a cabo.
Cualquier defecto que se detecta y señaliza de manera local en el sinóptico del equipo se trasmite de forma remota previa temporización de 10 a 20 segundos.
Para dicha trasmisión se dispone de un contacto inversor, libre de potencial, de un relé, el cual está cableado a bornes internos del equipo, quedando disponible para el usuario.
Las baterías de Ni-Cd soportan mejor el uso y son más fiables y duraderas que las de plomo estanco; son por ello la primera elección en equipos donde se requiere una gran fiabilidad y duración de vida.
Proporcionan altas puntas de corriente. Soportan su descarga total y su mantenimiento en condiciones de descarga total durante semanas. También soportan mejor las condiciones de temperatura elevada. Su fin de vida suele ser gradual, con una pérdida progresiva de capacidad.
Su principal inconveniente es su mayor precio y que su utilización queda restringida a capacidades del orden de 24 Ah como máximo.
Cuando es necesario una mayor capacidad, normalmente se recurre a las baterías de plomo estanco. En este tipo de baterías existen diversas calidades. Luznor utiliza baterías de 10 a 12 años de duración de vida de diseño, si bien éstas solo existen a partir de una capacidad mínima del orden de 18 Ah.
Las baterías de plomo estanco no permiten su descarga total y su mantenimiento en estado descargado. Por ello, los equipos que las emplean disponen de un contactor en su salida que corta toda descarga a partir de la detección de batería descargada. Su fin de vida suele ser bastante brusco y muchas veces sin aviso previo.
Se emplean, fundamentalmente, dos tipos de baterías:
• De níquel- cadmio, estancas, de tipo cilíndrico, sin mantenimiento, que se montan en bloques de hasta 10 elementos, llamados flascos.
La tensión típica de un elemento es de 1,2 V y su capacidad de 1,5 Ah a 7 Ah. Alcanzar tensiones y capacidades más elevadas se logra según se monten elementos en serie y/o en paralelo.
• De plomo, estanco, sin mantenimiento.
La tensión típica de un elemento es de 2 V y normalmente vienen montadas en bloques de 6 elementos (12 V). Alcanzar tensiones y capacidades más elevadas se logra según se monten bloques de 12 V en serie y/o en paralelo.
Los equipos CB proporcionan tensión continua en su salida, tanto cuando hay tensión de red como cuando no. No existe ninguna discontinuidad en dicha tensión en el momento del fallo o retorno de red.
Los equipos CBQ proporcionan tensión alterna en su salida cuando hay tensión de red y continua cuando no la hay. Existe un pequeño corte de tensión en las transiciones de la salida de alterna a continua y viceversa. Son equipos previstos, fundamentalmente, para cargas de utilización que soporten tanto tensión alterna como continua como, por ejemplo, lámparas incandescentes.